El pasado 7 de marzo, la comunidad educativa se reunió en una emotiva Eucaristía para dar inicio al año escolar, vivimos un momento de profunda reflexión y gratitud. La celebración, presidida por el párroco del sector Padre Mauricio Andrade, congregó a estudiantes de 4° a 8° básico, centro de padres, padres y apoderados, Hijas de la Caridad, docentes, asistentes de la educación y Equipo Directivo de nuestro establecimiento.
La Eucaristía fue un espacio de encuentro y fortalecimiento de los lazos que unen a la familia educativa vicentina. En un ambiente de alegría y recogimiento, los presentes elevaron sus oraciones y agradecimientos a Dios por las bendiciones recibidas y por la oportunidad de aprender, crecer y construir juntos un futuro lleno de esperanza.
En consonancia con el inicio de la Cuaresma, que tuvo lugar el pasado miércoles 5 de marzo con el Miércoles de Ceniza, durante la Eucaristía se realizó la imposición de ceniza a todos los presentes. Este gesto simbólico, que nos recuerda nuestra condición humana y la necesidad de conversión, añadió un profundo significado a la celebración, invitando a la reflexión y al compromiso con un camino de renovación espiritual.
El Padre Mauricio, en su homilía, invitó a los presentes a vivir el año escolar con entusiasmo, responsabilidad y compromiso, poniendo siempre a Dios y a la Virgen como guía y protección. La Eucaristía culminó con un sentimiento de profunda gratitud y la certeza de que, con la bendición de Dios, este será un año de grandes logros y aprendizajes.
Agradecemos a todos los miembros de la comunidad educativa por su participación en la emotiva Eucaristía, donde hemos renovado nuestro compromiso con el espíritu Vicentino y el legado de San Vicente y Santa Luisa de Marillac. Que este sea un año lleno de bendiciones y aprendizaje para todos.
Fuente: Área de Comunicaciones.
Fotografías: Área de Comunicaciones.
Escuela San Vicente de Paúl.